Esta  celebración  se lleva a cabo gracias a la Coalición Mundial contra la Neumonía Infantil, formada por organizaciones internacionales, académicas, de investigación, etc. cuya pretensión es la de informar a la población para prevenir una enfermedad que cada año mata a millones de niños.

     La neumonía es una enfermedad del sistema respiratorio que afecta a los pulmones de millones de personas cada año,  frecuente en ancianos, niños, personas inmunodeprimidas y en aquellas que padecen patologías crónicas como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), cardiopatías, insuficiencia renal, cáncer, cirrosis hepática o diabetes.

     Esta enfermedad se ha convertido en la principal causa individual de mortalidad infantil en todo el mundo, llegando a matar a más de un millón y medio de niños menores de cinco años, siendo de mayor frecuencia en África subsahariana y Asia meridional.

    La importancia de la vacunación como medida preventiva de neumonía es incuestionable. Para ello, se dispone de la vacuna antineumocócia, recomendada entre otros casos en personas con enfermedades crónicas, pacientes inmunodeprimidos o grupos de riesgo.

    Entre las principales causas se encuentran: Bacterias (Neumococo, Mycoplasmas y Chlamydias) y Virus: el virus sincitial respiratorio es la causa más frecuente de la neumonía vírica.

    Existe una gran cantidad de síntomas que pueden variar dependiendo de la edad y de la causa de la neumonía de la persona. Entre los síntomas más generales se encuentran: tos, fiebre, escalofríos, dolor de pecho, dolor abdominal, congestión nasal y pérdida de apetito.

    Sin embargo, la enfermedad también puede cursar de manera más leve, sobre todo en personas jóvenes, que frecuentemente tienen malestar general, tos seca, dolor de cabeza y artromialgias. Tampoco en los ancianos los síntomas son demasiado evidentes, por lo tanto hay que estar en alerta continua.