Chávez, contribuyó como ningún líder desde el sur del mundo a superar la inercia, la falta de proyectos y la sensación de derrota del socialismo y las izquierdas a nivel mundial. Luego de su victoria presidencial, Chávez encabezó un profundo y revolucionario proceso de transformación democrático e institucional con la irrupción y protagonismo del pueblo venezolano, que explica, en lo sustantivo, la virulencia con que la élite venezolana y aliados externos combaten hoy al gobierno de su sucesor el Presidente Nicolás Maduro y a las transformaciones generadas por la revolución Bolivariana.
Hoy, el proceso socialista Bolivariano con el gobierno del Presidente Maduro son objeto de una brutal agresión imperialista, sin precedentes, dirigida por el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump y con apoyo de sus aliados de derechas de gobiernos europeos y de América Latina y el poder mediático internacional.
Hugo Chávez, fue un gran pedagogo popular, reinterpretó y proyectó la memoria oral de los oprimidos y le confirió un nuevo sentido a la concepciones de patria y soberanía. Si hay alguien que ejerció como practica constante la pedagogía del oprimido de la que hablaba el maestro brasileño Paulo Freire fue el Presidente Comandante.
El Comandante Chávez, fue un militar venezolano que nos hizo reconciliarnos desde la izquierda con lo mejor de los soldados que son parte de nuestros pueblos.
Contribuyó como nadie a recuperar nuestra historia de luchas por la emancipación de nuestra América con una nueva interpretación y re-lectura de los héroes y heroínas de nuestras luchas por nuestra independencia. A los próceres los bajó de sus pedestales y los explicò en contraposición de las interpretaciones oficiales siempre al servicio de las oligarquías y de las élites dominantes. Los re-apropió para el pueblo desde la cultura popular y los intereses de los explotados. “A paso de vencedores” como decía a menudo evocando la batalla de Ayacucho, la revolución bolivariana avanzó en un genuino proceso sin “calco ni copia” como señalará Mariátegui y el cual Chávez encarnó como “una creación heroica” hasta el final de sus días.
Chávez trajo al presente la experiencia del Presidente Salvador Allende y de la Unidad Popular chilena, liderando en su país una titánica disputa con el imperialismo y sus aliados locales sobre el carácter mismo de la democracia para avanzar en la transformación socialista.
Un combate que continúa y que ya tiene 20 años y que alcanzó una dimensión nunca antes vista instalando nuevas formas de democracia participativa. La vía democrática al socialismo que había sido ahogada en sangre y fuego por golpe militar en Chile y que lo costó la vida al Presidente Salvador Allende y a miles de víctimas, fue retomada, a partir de sus propias características históricas, por el pueblo venezolano bajo el liderazgo del Presidente Hugo Chávez.
No hubiera sido posible el avance de l@s socialistas venezolanos, sin un cambio en la correlación de fuerzas en latinoamerica. Hugo Chávez contribuyó de manera estratégica a la integración de nuestros pueblos y fue un genuino continuador del libertador Simón Bolívar en la lucha por la segunda independencia de nuestra América. Fue un tenaz y decisivo impulsor del ALBA, UNASUR, MERCOSUR y la CELAC. (Espacios e instancias hoy bajo cuestionamiento y ataque de los gobiernos de derechas y ultraderecha de Brasil, Argentina y Chile).
A Hugo Chávez su pueblo no lo olvida, al contrario, hoy más que nunca su pensamiento y trayectoria constituye una inspiración constante y cotidiana de las y los venezolanos frente a la brutal agresión externa e interna desestabilizadora de la cual son objeto.
Tampoco lo olvidaremos las y los Allendistas chilenos, ni los pueblos que luchan por la justicia, la autodeterminación y el socialismo. Por eso, hoy como ayer, somos solidarios con el pueblo y el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela.